MONKEY BREAD

Canela, cocina, Dulce, Masas fermentadas, Postres

Cada año a final de curso los niños y niñas de la clase hacemos un regalo conjunto a nuestra tutora como agradecimiento por habernos enseñado tantas cosas y sobre todo, por aguantarnos. El año pasado con la pandemia y las clases online nuestros padres no se pusieron de acuerdo y cada uno le llevó algo por su cuenta. Mi abuela como siempre, no tenía un duro y la muy cutre le llevó una tarta. Pues oye, parece que triunfó porque a mi seño Lucía le encantó, y es que era un Monkey Bread. Le gustó tanto que hasta le pidió la receta. Pero ya sabéis cómo es mi Lela, lo fue dejando y dejando y luego pensó que mejor la publicásemos en el blog. Como el concepto de tiempo lo tiene un poco tocado, de eso hace ya 11 meses. Os diré que el Monkey Bread es probablemente mi pastel favorito, el sabor de la canela con la mantequilla y lo suave y esponjoso que es… se me hace la boca agua solo de pensarlo. Originalmente es una masa sin huevo pero nosotras, como siempre, a nuestra bola y la hemos cambiado un poco.

INGREDIENTES: 450 gr. harina de fuerza, 200 de leche entera, 25gr. de levadura fresca, 50 gr. de azúcar, una pizca de sal, 75 gr de mantequilla a temperatura ambiente, 1 huevo L. Para el emborrizado 200 gr. de azúcar ( puede ser morena como yo😜), 150 de mantequilla derretida, y canela por mí y por todos mis compañeros.

ELABORACIÓN: En un bol echamos la leche templada, añadimos el azúcar, la levadura y una cucharada de harina (recuerda, la harina siempre tamizada) mezclamos bien y dejamos reposar hasta que empiece a burbujear, más o menos 15 minutos. Entonces añadimos el huevo, la harina, la sal y amasamos, poco a poco incorporamos la mantequilla y seguimos amasando, haz una bola. (Está claro que si tienes un robot de cocina es mucho mas sencillo, pero lo puedes hacer a mano perfectamente). Deja reposar la masa unos 10 minutos tapada con un paño limpio o film transparente. Vuelve a trabajarla, como si estuvieras haciendo pan unos 5 minutos más. De nuevo haz una bola y otra vez que repose, esta vez hasta que doble su volumen. Espolvorea la mesa de trabajo con harina, pon tu masa y ve haciendo bolitas del tamaño de una nuez, no todas iguales. Enciende el horno con calor arriba y abajo = a 170 ºC. Ten preparado un bol con la mantequilla derretida, otro con el azúcar y la canela mezclados y el molde donde vayas a hornear el pastel. Ahora llega la parte más pringosa y divertida, coge una bola introdúcela en la mantequilla y pásala por la canela con azúcar, ve poniéndolas en el molde. Cuando lo hayas llenado de bolitas, cúbrelo y deja que crezca otra vez. Hornea, dependiendo del tamaño de tu molde tardará más o menos, unos 25 minutos no se los quita nadie.

¿Qué creíais, que lo íbamos a hacer a mano?
Este poquito de levadura fresca.
Una bolita.

Muchas bolitas y es que la unión hace la fuerza.
¿Veis?, hay distintos tamaños.
Vuelta a reposar.
¡A hornear!
Del revés.
Del derecho.
En corona.
Este quedó de lujo.

Y hasta aquí nuestra receta de hoy. Se la dedico a mi seño Lucía que me ha ayudado a ponerme buena, me ha enseñado que las matemáticas pueden ser muy divertidas y me hace querer ir al colegio cada día, Gracias Seño.

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